KRYMSK -- Las lluvias
torrenciales y las violentas inundaciones dejaron al menos 134 muertos en la
región rusa de Krasnodar (suroeste) y este sábado los equipos de rescate
seguían buscando otros cuerpos en este zona rusa del Cáucaso, a orillas del Mar
Negro.
Según el último balance, 123
cuerpos fueron hallados en el distrito de Kymsk, una zona a 20 kilómetros del
mar, aquejada por una crecida de varios metros de altura durante la noche,
indicó la policía.
Numerosas víctimas no pudieron
ser identificadas, precisó a la AFP un responsable de la fuerza especial de
catástrofes naturales.
Otros nueve cuerpos fueron
hallados en la ciudad costera de Gelendjik, un poco más al oeste, a orillas del
Mar Negro, y dos más en la ciudad portuaria vecina de Novorosisk.
Según las autoridades locales
más de 12,000 habitantes y 4,000 viviendas fueron afectadas.
Un fotógrafo de la AFP en el
lugar vio viviendas devastas, el nivel agua alcanzó en la mayoría de los caso
el primer piso, los vehículos estaban volcados y los animales muertos a la vera
de las carreteras.
El presidente ruso Vladimir
Putin se dirigió a la zona siniestrada, indicó el Kremlin.
“El presidente sobrevoló en
helicóptero las zonas más afectadas por las lluvias y las inundaciones”, dijo
el Kremlin agregando que Putin se encontraba el sábado por la noche en Krymsk
para una reunión de crisis.
El viernes, cuando las fuertes
lluvias ya habían inundado Gelendjik, la prensa anunció la muerte de cinco
personas que se electrocutaron con cables sumergidos.
Según varios testimonios,
durante la noche, hacia las 3 de la mañana, hubo una gran inundación que sorprendió
a los habitantes mientras dormían.
“El agua subió muy rápido,
inundó la planta baja de las casas en 5 o 10 minutos, se llevó los bordes de
las aceras e incluso trozos de asfalto”, explicó por teléfono a la AFP una
habitante de Krymsk, Tatiana Antonovna.
“Fue inesperado, probablemente
murieron muchas personas mayores”, explicó esta mujer, que puedo escapar a las
inundaciones porque su casa está elevada.
“Por la mañana aparecieron
botes por las calles, una mujer pasó la noche en lo alto de un árbol y la
salvaron”, añadió.
Otros testigos citados por la
agencia Ria Novosti hablaron de un “muro de agua” que lo arrasaba todo a su
paso.
Algunas personas dudaban que
la lluvia fuera la única responsable de las inundaciones y hablaron de la
posibilidad de que se hubiera roto un embalse artificial situado más arriba de
la ciudad, o incluso que se haya largado agua del dique de forma intencional.
En Moscú, el partido de la
oposición Iabloko afirmó que disponía informaciones que confirmaban esas
sospechas.
“La rápida crecida fue
provocada porque se largó agua del embalse de Neberdjaevski, situado más arriba
en las montañas. La población no fue informada”, escribió Iabloko en un
comunicado exigiendo que los culpables sean castigados por “homidicio por imprudencia”.
El portavoz de Alexander
Tkatchev, gobernador de la región de Krasnodar, calificó estas acusaciones de
“delirio”, subrayando que la cantidad de precipitaciones de la víspera,
equivalen a las de cinco meses, suficiente para provocar el drama.
La agencia federal de recursos
hídricos también denunció estos “inventos”, afirmando que todos los embalses
artificiales de la región funcionaban “de manera normal”, según Interfax.
El comité de investigación
rusa anunció no obstante que inició un estudio y envió expertos al lugar.
La zona afectada se quedó sin
electricidad y con carreteras cortadas mientras que el tráfico ferroviario fue
interrumpido. La actividad del puerto de Novorosisk, uno de los más importantes
del país, también quedó interrumpida por las inundaciones, indicó la agencia
Ria Novosti
Según la agencia Itar-Tass, el
nivel del agua alcanzó los siete metros en el distrito de Krymsk.
“No habíamos visto nada así en
los últimos 70 años”, dijo el gobernador de Krasnodar, Alexandre Tkachev.
Estas inundaciones afectan a
una zona donde viven unas 13,000 personas, según datos de la administración
regional.
No hay comentarios:
Publicar un comentario