Los embalses alcanzan el 72% de capacidad y superan en un 27% la media del último decenio.El presente invierno es ya el más lluvioso en España de los últimos 51 años. Con los datos de pluviosidad registrados desde el pasado 10 de diciembre, hay que remontarse hasta 1959 para encontrar una cantidad similar de litros de agua recogidos por metro cuadrado, según avanzó ayer el portavoz de la Agencia Española de Meteorología (Aemet), Ángel Rivera.
Este organismo todavía está actualizando sus estadísticas sobre lluvias, por lo que ayer no pudo precisar el volumen total de lluvias caídas hasta la fecha. No obstante, los últimos datos oficiales, de enero, ya apuntaban a que este invierno batiría récords: el primer mes del año acabó con una media de precipitaciones acumuladas de 95 litros por metro cuadrado, un 43% más que el valor medio que se toma como referencia, extraído del período 1971-2000.
Diciembre fue asimismo un mes muy húmedo. Se registró una media de 155 litros por metro cuadrado, frente a los 81 litros habituales. Las lluvias han sido generalizadas en la Península, Canarias y Baleares. Si bien los mayores chaparrones han caído en el sur de Andalucía, Catalunya y el sureste de Castilla-La Mancha.
Aumenta la reserva de agua
Como consecuencia de las precipitaciones, los embalses alcanzan en este momento el 72,2% de su capacidad. La reserva actual es de 39.954 hectómetros cúbicos de agua embalsada, 1.585 más que la anterior semana.
Las reservas hidráulicas representan un 25% de aumento sobre la misma fecha del año pasado (31.762 hectómetros cúbicos) y un 27% respecto a la media de los últimos 10 años (31.426).
Exceptuando los embalses de las cuencas internas del País Vasco, que están al 100% de su capacidad, los del sur de Andalucía son los más beneficiados por las lluvias. De hecho, la Agencia Andaluza del Agua desembalsa en este momento agua de 55 de los 84 pantanos de la autonomía para evitar que se desborden, dado que superan los niveles de seguridad y se esperan más lluvias abundantes en las próximas horas.
Las temperaturas, en cambio, no están siendo inhabituales este invierno. Según la Aemet, en el conjunto de la Península se han dado menos heladas de las habituales, y las temperaturas, en general, están siendo normales para la época, con medias dentro del promedio de muestra que utilizan los meteorólogos.
"Hay una percepción de que está siendo un invierno frío, porque muchos días son nublados, hace viento y está lloviendo mucho, pero no es un año frío, no ha habido grandes heladas ni nevadas", resume el portavoz de la Agencia.
No obstante, el mes de diciembre, sobre todo en la segunda mitad, fue un mes "ligeramente más frío de lo normal", según la Aemet. Se hizo notar también en enero sobre todo en la mitad norte de la Península. En el resto, las temperaturas fueron normales. En Baleares y, especialmente, en Canarias, incluso hizo más calor del habitual.
Fuente
www.publico.es
