La lluvia continuó cayendo sobre la capital, Kingston, y los equipos de emergencia estaban tratando de localizar a por lo menos otros 14 desaparecidos, casi la mitad de los cuales se creía que habían sido arrasados por deslizamientos de tierra que destruyeron un barrio pobre.
Las autoridades advirtieron que la cifra de muertos iba a aumentar con certeza y se apresuraron a confirmar varios informes de víctimas fatales por la tormenta.
"Las cifras (de muertos) van a aumentar, estoy seguro," dijo Richard Thompson, el director general adjunto de la oficina de manejo de desastres de Jamaica, que puso la cifra de muertos en cinco.
La cifra más reciente incluye a dos albañiles que murieron el jueves por la madrugada, cuando una casucha en la que residían temporalmente se derrumbó por un deslizamiento de tierra provocado por las fuertes lluvias que saturaron el suelo de agua, dijo Thompson.
Los empleados dormían en la choza, levantada en un barrio de lujo en las colinas de Kingston, para ahorrar dinero mientras trabajaban en la casa de un cliente.
También falleció la niña Tashanna Wallace, de cinco años, al caer en su cama una rama de árbol que perforó la casa de madera donde vivía con su abuela en el municipio de St. Catherine.
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