Brasil no cuenta con un sistema eficiente de prevención de desastres naturales

En Brasil las lluvias y deslizamientos de tierra que afectan la región montañosa de Río de Janeiro desde hace una semana, dejaron al menos 700 muertos.

Al tiempo que continúan las tareas de búsqueda y rescate, las autoridades advierten que la cifra de fallecidos podría aumentar en los próximos días, en lo que se considera la peor catástrofe natural de la historia brasileña.

Unas 13.000 personas fueron evacuadas de Nova Friburgo, Teresópolis y Petrópolis, que son las localidades más afectadas.

Vamos a conversar con Alberto Armendáriz, corresponsal del diario argentino La Nación, en Brasil.

Antes de ir a los detalles de lo que está ocurriendo sería bueno ubicarnos porque sucede que estos hechos no tienen que ver estrictamente con la ciudad de Río de Janeiro, más bien suceden a 150, 200, 300 kilómetros de distancia, en una zona alta a unos 2.000 metros, ¿cómo es esa región, cómo es el turismo, cómo es la economía de ese lugar?

ALBERTO ARMENDARIZ:
Muchas veces se piensa que lo que está sucediendo es acá en la ciudad de Río de Janeiro, pero como bien decís es a unos 200, 300 kilómetros. Es una región de sierras muy popular entre los cariocas que tratan de escapar del calor durante el verano y se va para esa región que tienen unos cinco grados menos que en la ciudad.

Es una zona de mucha emigración suiza por eso se la conoce como la Suiza brasileña y está lleno de pueblitos pintorescos con casas de una arquitectura de estilo suizo. Hay muchos quesos, fiambres, y además se hacen mermeladas y ese tipo de alimentos. Es un destino turístico popular entre los cariocas y además también de casas de fin de semana para la alta burguesía local. Hay, también, centros de vacaciones y colonias para chicos.

Hay gente que vive ahí, la industria local está principalmente centrada en la producción de vegetales de hortalizas, de ahí proviene el 45% de las verduras que se consumen en la ciudad de Río de Janeiro hoy.

Es el polo central de la moda de lencería, uno de los grandes polos de esta industria en Brasil, que también han sido muy afectados por estas tormentas…

JAE - …Has estado en estas zonas, ¿tiene uno que imaginarse algo así como Río con las favelas con viviendas precarias en los morros?

AA – Sí, hay mucho de eso porque es un problema que afecta a todo Brasil. Según un último informe hay cinco millones de personas que viven en áreas de riesgo lo que se considera las laderas de los morros y ahí en los barrios más humildes las favelas que hay alrededor de las ciudades como de Teresópolis, de Petrópolis, en Nova Friburgo. Ahí también hay muchas favelas y estos han sido los barrios que más muertes han sufrido, según el último informe esta mañana son 712 las víctimas fatales confirmadas. Se espera que en los próximos días siga creciendo esa cifra porque hasta el momento hay unos 220 desaparecidos todavía, hay gente que ha quedado enterrada. Esto ocurrió en la madrugada del martes al miércoles de la semana pasada y mucha gente perdió la vida y fue arrastrada por los ríos o los deslaves y que traían muchas rocas de las cimas de las montañas.

JAE – ¿Cómo ha sido la reacción del Gobierno? La presidenta Dilma Rousseff ha estado por allí, pero también han surgido críticas al gobernador del Estado de Río de Janeiro, Sergio Cabral.

AA – Sí, así es. Estas lluvias torrenciales se están volviendo cada vez más comunes y el año pasado fue trágico porque el Estado de Río de Janeiro sufrió dos catástrofes naturales a principios de año donde murieron 53 personas en la zona de Angra do Rei que es el sur de Río de Janeiro, también una zona muy popular. Diría que las dos zonas turísticas más populares entre la gente acá son justamente el sur la zona de Angra do Rei que está llena de pequeñas islitas y después la zona serrana. Esto está afectando muchísimo al Estado y el año pasado además de eso de Angra do Rei después en abril acá nomás en la ciudad vecina de Río que se llama Niteroi ahí también hubo un deslizamiento de tierra en un morro y murieron otras 47 personas. Entonces se está quejando mucho la gente de acá a las autoridades estatales que no han tomado las medidas preventivas para evitar este tipo de tragedias…

JAE - …¿Qué viene ahora aparte de la búsqueda de cuerpos o de gente? ¿Qué pasa con la reconstrucción? ¿Está evaluado ya el costo que va a implicar esto?

AA – Sí, se estima que va a costar por lo menos unos 1.200 millones de dólares. En el caso de la presidenta Dilma Rousseff, que tiene tan sólo dos semanas en el poder, ha sido muy bien vista la reacción rápida que tuvo su Gobierno porque en menos de 24 horas ella ya estaba acá en la región y además bajó a estar con la gente, se embarró ahí, y eso fue muy bien visto y además ha tomado medidas como ordenar la reestructuración total del sistema de defensa civil y en el sistema de alarma para prevención de desastres naturales porque lo que dejó bien claro esta catástrofe es que Brasil no cuenta hoy con un sistema eficiente de prevención de desastres naturales.

JAE – ¿Cómo afecta esto que ocurrió, los planes de Brasil para ser la sede del mundial de fútbol 2014, y la sede de los juegos olímpicos que van a tener lugar en Río en 2016?

AA – Esto es una llamada de alerta brutal para los brasileros porque pone al descubierto que hay fallas de infraestructura muy grandes y nuevamente deja en evidencia el grado del problema que es la ocupación irregular en los morros porque hay gente que vive ahí que tiene agua, que tiene electricidad y todo y que las autoridades han dejado que vivan en lugares de alto riesgo. Entonces esto está poniendo muy en evidencia eso nuevamente. Creo que acá se están dando cuenta que tienen que hacer algo al respecto y creo que desde el comando de Dilma Rousseff van a estar trabajando en eso.

A la vez, la producción de la zona serrana de vegetales ha afectado los precios que se pagan ahora en los restaurantes en los supermercados en Río de Janeiro, los precios han subido muchísimo.

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