Trabajadores rescatistas de Tailandia luchan por evitar
un desastre humanitario, mientras que la peor inundación en cincuenta años
hunde gran parte del país, dejando a miles de personas desamparadas.
Cerca de 270 han muerto desde mediados de Julio, después
de que las pesadas lluvias de un monzón dispararon inundaciones y
deslizamientos.
La primer ministro de Tailandia visitó la antigua ciudad
de Ayutthaya, 65 millas al norte de la capital Bangkok, para hablar con los
evacuados que fueron obligados a dejar sus hogares.
[Yingluck Shinawatra, primer ministra de Tailandia]:
"Queremos rescatar y evacuar a la gente
urgentemente. Hoy, la Primer Comandancia Regional y los dirigentes de la Armada
están en el área. También estamos tratando de proteger la zona industrial y las
propiedades de la gente".
La armada anunció que tres centros de evacuación se han
instalado para apoyar 7 mil evacuados solamente en la provincia de Ayutthaya.
El ministro de comercio del país dijo que, debido a la
inundación, había reducido su pronóstico principal de producción de arroz de 25
millones de toneladas a 21.
Tailandia es el más grande exportador de arroz del mundo.
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