La avenida Quintana del barrio General Mosconi, camino al hospital Alvear, no soportó el temporal.
Hubo múltiples inconvenientes, servicios públicos afectados y familias que debieron ser evacuadas ante la emergencia. Comodoro Rivadavia vio paralizada casi por completo su actividad debido a la suspensión del servicio de transporte público de pasajeros y a la afectación de sus principales vías de comunicación ya que tanto la Ruta 3 como la 1 presentaban circulación limitada debido a la acumulación de agua.
La lluvia afectó por igual a todos los sectores. Los barrios altos sufrieron inundaciones en algunas zonas consideradas críticas y el área céntrica se vio impactada por la cantidad de agua y lodo que se desprendió, sin salida, desde los sectores altos. A primera hora se advirtió que solamente 10 de las 57 escuelas de nivel primario dictaron clases y del mismo modo, el nivel educativo superior como la Universidad Nacional de la Patagonia contemplaron la situación climática para suspender sus actividades.
Con el intendente Martín Buzzi en Capital Federal, fue el secretario de Gobierno, Jorge Echelini, el encargado de realizar una evaluación. Definió como “crítica” la situación en los barrios Treinta de Octubre y Abel Amaya como en la denominada Fracción 14 donde se hizo necesario el envío de móviles para evacuar a las familias con hijos menores y también el costero sector del Stella Maris determinó un nuevo foco de inundación. “Relevamos la transitabilidad y estamos medianamente bien. Todas las arterias céntricas están transitables con precaución o reducidas a una sola mano como la Ruta Uno, el sector del autódromo o algunos tramos del Camino “Roque González”, explicó el funcionario.
Las cuadrillas destinadas por la Municipalidad de Comodoro Rivadavia fueron asignadas para trabajar sobre anegamientos detectados. Nuevamente la avenida Chile exhibió una postal repetida: autos tapados casi por completo con el agravante de algunos edificios en mal estado. Los pluviales se vieron desbordados en su capacidad y debido a ello, el agua acumulada decantó a lo largo de varias cuadras. A pocos metros, humildes construcciones levantadas en asentamientos ilegales reflejaban con crudeza la condición de sus ocupantes quienes a pesar del riesgo y la humedad, optaban por quedarse en el lugar para evitar sufrir algún robo de pertenencias.
Ante la grave situación, tanto la Sociedad Cooperativa Popular Limitada como Clear aportaron personal y equipamiento a disposición del Comité de Emergencia Municipal que convocó durante toda la jornada a miembros del gabinete en instalaciones de Defensa Civil, donde se canalizaban los pedidos básicos de nylon y leña recomendando a la población que se abstenga de transitar por la ciudad, haciéndolo solamente en caso de extrema necesidad dado los inconvenientes ocasionados por la lluvia.
La Municipalidad dispuso que los Centros de Promoción Barrial y Asociaciones Vecinales asistan a los vecinos de los distintos barrios con algún tipo de ayuda o asistencia ante la necesidad causada por la lluvia con el propósito de evitar la saturación de las líneas telefónicas de Defensa Civil. Recién a media tarde, la lluvia cesó y dio paso a un panorama más optimista a pesar de que el pronóstico adelanta la posibilidad de que vuelvan a producirse precipitaciones durante la noche.
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